Evidentemente, soy totalmente consciente de que esto podría suceder en cualquier momento, pero me pregunto, si después de 10 años en la entidad rojiblanca, todos los profesionales que allí trabajábamos nos merecíamos algo más que una simple llamada de un minuto.
Después de 10 años de trabajo solo valemos un minuto de su tiempo? No lo se.
A parte de esta reflexión, desde el dolor y la sensibilidad, al Atlético de Madrid le agradezco que un día me diese la oportunidad de entrar a trabajar en esta formidable casa.
Han sido mucho los momentos buenos, son muchos los recuerdos que me llevo, son muy buenos los amigos que dejo, y son excelentes los compañeros con los que he tenido la oportunidad de trabajar.
En el Atlético de Madrid he disfrutado de grandes éxitos como el campeonato de liga logrado con el juvenil divisón de honor.
He disfrutado de grandes gestas como remontar un 4-1 al Real Madrid en Valdebebas.
He vivido grandes alegrías como el día que me comunican que formaría parte del cuerpo técnico de 2º equipo.
etc etc.
He viajado por toda España, por Europa y Asia....me he reído , he llorado y he vuelto a reír, por eso cuando miro hacia atrás solo puedo pensar en dar las gracias al Atlético de Madrid porque un día confió en mí y me permitieron formar parte de su familia.
En esta nueva etapa que comienzan les deseo toda la suerte del mundo, que su proyecto culmine en grandes éxitos y que todos los que ahora formen parte de la familia Atlética disfruten tanto como yo he disfrutado a lo largo de todos estos años.
Solo quiero hacer una pequeña reflexión para los dirigen. Todos los técnicos trabajamos con profesionalidad , devoción y mucha ilusión. Por eso cuando alguien tiene que tomar una decisión tan drástica como comunicar a un técnico que no va continuar formando parte del club deberían de detenerse pensar si toda esa profesionalidad y toda esa ilusión se merece algo más que una llamada de teléfono. Lo cortés no quita lo valiente.
Gracias Atlético de Madrid.